31 agosto 2005

TNT / FIREHOUSE / NEXX

8 de Mayo. Sala Aqualung
Muchos fueron los que salieron alucinados de la actuación que TNT ofreció el año pasado en el festival de Lorca Rock. Incluso la propia banda quedó enormemente complacida de la calurosa acogida que el público español les brindó. Así que el mismo grupo se comprometió a actuar como cabeza de cartel en nuestro país, aunque sin especificar cuándo ni dónde. Pero ese momento por fin llegó, y por si era poco acompañados de otros miuras del rock melódico como Firehouse, y los siempre grandes Nexx. El lugar escogido fue la sala Aqualung, un local de mediano aforo que acabó casi lleno para ver la descarga de este cartelazo de lujo.
La salida de Nexx a escena se retrasó unos 45 min., lo cual generó un ligero descontento inicial entre los asistentes. Con los problemas técnicos ya resueltos, Patri y los suyos abrían fuego con un par de temas inéditos que no quedaron nada mal, a pesar del sonido algo embarullado que salía de por los altavoces. Continuaron con otros dos cortes incluidos (ahora sí) en su único álbum "Colours", que arrancaron la cerrada ovación de los allí presentes. Aunque la sorpresa fue sin duda esa tremenda versión que se marcaron del "Eye In The Sky", mítico tema de Alan Parsons Project, que Nexx supo llevar de manera genial a su terreno, logrando así uno de los momentos álgidos de la velada. El público congregado coreaba el nombre del grupo pidiendo un tema más, pero Nexx tuvo que retirarse del escenario a regañadientes para que la siguiente banda del cartel pudiera dar comienzo.
Ya íbamos avisados desde su anterior visita a Madrid de lo mucho y bueno que pueden ofrecer en directo los americanos Firehouse. Los que pudimos disfrutar de ellos el año pasado no nos sorprendimos tanto, pero los que era la primera vez que los veían coincidían unánimemente en catalogar su actuación como una de las mejores vividas en nuestra capital en los últimos tiempos. Se plantaron sobre las tablas de Aqualung con las ideas muy claras, nada de experimentos ni cosas raras, había que dar a la gente lo que la gente quería y así lo hicieron con creces. Un set basado casi por completo en su dos primeros trabajos, con algún recuerdo para lo mejor de su último disco "Prime Time", una actitud de entrega y profesionalidad total, un sonido magnífico, muy alto pero sin distorsionar en ningún momento, y cuatro pedazo de músicos que sacaron lo mejor de sí mismos y nos lo ofrecieron en cincuenta minutos de hard rock de alta escuela, además de divertido, demostrando que no tienen porqué estar reñidas calidad y diversión. Desde el primer acorde vimos lo que se nos venía encima, con un fantástico frontman como C.J. Snare, lleno de potencia y energía, cantando altísimo y con mucha calidad. La labor de los coros a cargo del guitarrista Bill Leverty y del batería Michael Foster completaron un trabajo vocal impecable. En cuanto a su aportación instrumental, tanto de estos dos como del nuevo bajista del grupo, fue muy buena, con un Leverty muy elegante al mástil, y con Foster espectacular en la pegada y malabarismos de la baqueta, bien acompañado por su compañero en el bajo. El set no podía estar mejor elegido, desde la inicial "Lover’s Lane" que nos predispuso para el primer cañonazo con el que se dieron a conocer en todo el globo, "All She Wrote", con la que botamos como posesos y nos dejamos la garganta con el celebérrimo estribillo "Bye bye baby bye bye". A continuación dejaron una de las dos piezas de su último disco, la pegadiza "Crash" que fue bien recibida por el personal a pesar de ser prácticamente desconocida. Momento tierno con la emotiva "When I Look Into Your Eyes", en la que CJ se hizo cargo del teclado para acompañar una emotiva balada. Volvió el dinamismo y la caña con "Shake & Tumble" coreada a pulmón, al igual que la festiva "Door To Door" en la que el batería Michael Foster se encargó de la voz y muy bien por cierto, justo antes de hacer un poderoso solo. "Overnight Sensation" siguió con el listón muy alto con los presentes absolutamente entregados hasta el final, tanto con los temas más cañeros que cerraron, como con la balada previa "Love Of A Lifetime", que no fue más que un pequeño descanso para el huracán que se avecinaba con "Reach For The Sky" que sonó como un cañón, y con la festiva "Don’t Treat Me Bad" que fue el colofón a una soberbia descarga que fue lo mejor de la noche, por encima de los cabezas de cartel. Nos quedamos con las ganas de más, se nos hizo cortísimo, a ver si para la próxima tienen más tiempo y volvemos a disfrutar. Buenísimos.
Y tras la apoteósica aparición de los estadounidenses, venía lo que supuestamente era el plato fuerte de la noche... Pero, y para desgracia de todos, lo de TNT fue un quiero y no puedo. Numerosos problemas plagaron la actuación de la banda de Tony Harnell & Ronnie LeTekro, que aun ofreciendo un buen concierto, ensombrecieron notablemente la descarga de los noruegos. Para empezar, el sonido fue exageradamente alto, provocando que parte del público se fuera hacia atrás para evitar mayores desgracias personales. Siguiendo por el set, que no fue todo lo brillante que esperábamos (indudablemente faltaron "Tonight I’m Falling" y "Lonely Nights"); con el bueno de Tony haciendo cantar al personal en los temas menos conocidos por aquí ("Downhill Racer", "Seven Seas"). Los coros pregrabados que llevan utilizando en directo desde la época de "Tell No Tales" tampoco ayudaron en absoluto. Y ya para finalizar, claramente TNT no pudo competir con Firehouse, auténticos triunfadores de la noche. Aparte de los susodichos Harnell y LeTekro, la banda venía configurada por Diesel Dahl a la batería; y un teclista y un bajista que ni ellos mismos presentaron, ni nadie conocía de nada. Entre los temas interpretados destacaría las potentes "Caught Between The Tigers" y "Forever (Shine On)"; la sensibilidad de "Fantasía Española" (única vez interpretada en directo!!!); la magia y calidad de "Give Me A Sign"; y por supuesto, la esperada ristra de clásicos ("Intuition", "Listen To Your Heart", "10,000 Lovers"). Pero la sorpresa vino al final con "Everyone´s A Star", en el que Harnell invitó a cantar a CJ Snare. Como era de esperar la tragedia se consumó, y el cantante de Firehouse se zampó crudito al pobre Tony (a nivel de voz, claro está). Tras tamaña ingenuidad por parte del pequeño vocalista, y el consabido "Always Look on the Bright Side of Life" (de Monty Python) para despedirse, tooooodos para casa. Las conclusiones que pude extraer fueron claras y contundentes: Nexx buenísimos (como siempre), Firehouse la leche (sin exagerar lo más mínimo), y TNT pues... ¿bien?, ¿regular? A mí desde luego me decepcionaron bastante, y como algún avispao dijo a la salida: "Firehouse tenían que haber vuelto a salir y haberse tocao todol set de los TNT". Y bien mirao, razón no le faltaba…
Rafa Carrillo (Nexx, TNT)
Mariano Palomo (Firehouse)